Rehabilitación Celrà

Ahora bien, la fabrica Pagans esta situada a un extremo del municipio, fuera del núcleo histórico. Para reforzar su papel como polo de atracción consideramos que hay que situar los accesos de los diferentes equipamientos que ocupan el conjunto fabril en un mismo punto, y por eso proponemos mantener la entrada a la biblioteca por la plaza del ayuntamiento. De este modo, se intensificará la actividad de la plaza al concentrar en un solo punto, el acceso de varios equipamientos importantes como son el ayuntamiento, el centro cívico, la estación de trenes y la nueva biblioteca.

Así pues, la nave este se convertirá en la nave de acceso de la nueva biblioteca. Se la concibe como un espacio de acogida, para atraer a los usuarios, situando además del área de acceso, las zonas con un programa funcional más social como son el área de diarios y revistas, la zona infantil, el espacio de apoyo, el espacio de formación, el espacio joven, y el área de música e imagen. En definitiva, todas aquellas partes del programa más abiertas, capaces de establecer sinergias entre ellas generando un clima estimulante que fomente el rol de la biblioteca como referente cultural del municipio. 

En la nave oeste proponemos situar el área de información y fondo general, y la zona de trabajo interno. Alejada de las partes más ruidosas del programa, la nave oeste tendrá una atmósfera reposada y silenciosa, ideal para el estudio y la investigación bibliográfica. Será donde se concentrará la parte más importante del fondo de la biblioteca con diferentes tipos de espacios para consulta.

Para pasar de la nave este de acceso a la nave oeste se dispone un volumen de vidrio que genera un impacto mínimo en la arquitectura preexistente y contiene el espacio polivalente y una parte de la zona de diarios y revistas. Será un volumen ligero con vistas hacia las fachadas de las dos naves y del centro cívico y con salida hacia el “jardín de la biblioteca”: un espacio exterior donde disfrutar de la cultura al aire libre. La colocación del espacio polivalente en el patio de conexión entre las dos naves, permite concebirlo como un nexo de interrelación de todo el conjunto de la Fábrica Pagans.

En el interior de las naves, se busca intervenir con el mínimo impacto posible y se trabaja con la madera como material de acabado de los muebles y paramentos verticales para generar un espacio acogedor y confortable. Se busca una arquitectura potente de grandes masas, de volúmenes sólidos, que sigue la línea de lo preexistente: una sucesión de grandes ventanas y pilastras que modulan el espacio. La intervención atiende este ritmo, y solo coloca en el espacio central una serie de volúmenes-estantería alineados a las pilastras de tal forma que se traslada el orden de vacío (ventanas) y lleno (pilastras) de la fachada al interior de las naves. Estos volúmenes-estantería modulan los espacios donde se dispondrán los diferentes elementos del programa. En el patio central se opta por un ambiente completamente diferente: aquí la arquitectura nueva pretende desaparecer, pasar desapercibida gracias a la transparencia del vidrio.